Escalando muros infernales hacia la gloria.
El otro día se dió lugar una de las primeras etapas grandes de primavera en el ciclismo, el Tour de Flandes. Nunca antes vi una etapa de estas características en directo, pero al verla se puede dar cuenta de la dureza del recorrido. Los abandonos eran constantes, los equipos se desestructuraban con una facilidad pasmosa en el pavés, los favoritos caían, solo resistían los mejores (y a veces ni eso).
Ese fue el caso de Cancellara. El suizo que parece que compite en moto tuvo una caída, resultado KO. LLegó Boonen con Pozzato y Ballan. Este último, viendo su poca probabilidad de victoria al sprint... Lo intentó como un poseso en los últimos kilometros, pero Boonen estaba fuerte y reaccionaba, Pozzato pedía la paz hasta el último instante.
Se impuso la razón, parece que Boonen vuelve a estar en una forma magnífica. Parece que cambian las tornas de los últimos años:
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